Peña Nieto: “síndrome avestruz”
Por: Redacción de www.sinembargo.mx
Casa de citas
Enrique Peña Nieto afirma en un nuevo video, que usa desde ayer como spot para “responder” a sus adversarios por múltiples acusaciones en su contra, que no va a caer en ese juego por “una muy poderosa razón”: “Hace seis años, México se vio dividido por campañas sucias que únicamente lograron la confrontación y el encono entre mexicanos. Hoy el país no quiere eso. No voy a dividir a México. Continuaremos haciendo una campaña de compromisos, que logre lo que México anhela: un cambio para recuperar la paz y la esperanza”, afirma el candidato del PRI a la Presidencia en su nuevo promocional. Se justifica así, para no dividir al país, de acuerdo con el video. Pero esto no deja a nadie contento. Las acusaciones de sus más cercanos oponentes son serias y, claro, son asuntos de interés público que el mexiquense y su equipo de campaña hacen mal en no encarar, pues –una vez más– muestran que para ellos es más cómodo esconder al candidato y sus supuestas irresponsabilidades, que salir a dar la cara. Más aún si se trata del puntero en las encuestas y quien, al menos como están ahora las cosas, es el hombre con las mayores probabilidades a ocupar la Presidencia de la República en los próximos seis años. La candidata Josefina Vázquez Mota y su partido, el PAN, lo acusan de no cumplir sus promesas y compromisos, firmados ante Notario Público, como gobernador del Estado de México, mientras que Andrés Manuel López Obrador y los partidos de la izquierda que lo apoyan, lo acusaron ante el IFE por los excesivos gastos de campaña que, de acuerdo con estos institutos políticos, ya rebasa el tope establecido por la autoridad electoral: 336 millones de pesos. Apenas el fin de semana, el propio AMLO acusó al priísta de derrochar el dinero a tal grado que sus anuncios en televisión son ya mayores a los que hacen Coca Cola y Sabritas. Ayer, en Nezahualcóyotl, el candidato de las izquierdas realizó un mitin sobre la avenida Chimalhuacán y cercano a un puente que también se ha ubicado como una de las obras inconclusas del gobierno del de Atlacomulco.
Pero para Peña Nieto es más fácil responder que no, que no va a explicar nada ni a sus contrincantes ni al pueblo de México: “La guerra sucia de hace seis años nos separó, provocó pleitos aún dentro de las mismas familias, ya lo vivimos y aprendimos que un país dividido se debilita y no avanza. Por eso yo no voy a dividir a México, ese es mi compromiso y tú sabes que voy a cumplir”, dice con mucha seguridad en el spot que se difunde por televisión y radio. Rehuir y no enfrentar esas responsabilidades, argumentando que no quiere pleitos, no es una respuesta para limpiar su imagen. Y el “efecto avestruz”, aquello de meter la cabeza en un hoyo, dejar hacer y dejar pasar los problemas, no es la actitud que se quiere de un hombre responsable, menos aún si se trata de quien busca tener la mayor responsabilidad pública de esta nación. * * * De nuevo, la evidencia tuvo que llegar de un diario extranjero, en este caso The New York Times, para que las autoridades mexicanas se pongan a indagar sobre un caso de corrupción en contra de la sociedad mexicana. El diario neoyorquino destapó el sábado pasado la noticia de que Wal-Mart de México pagó al menos 24 millones de dólares para sobornar a funcionarios del país, con el propósito de aumentar su dominio en el mercado nacional, desde antes de 2002. Los actos de cohecho, supuestamente practicados por los más altos ejecutivos mexicanos de Wal-Mart y funcionarios públicos de todos los niveles en México, permitieron a la cadena estadounidense, que en nuestro país y Centroamérica preside y dirige actualmente Scot Rank, posicionarse como líder en el sector comercial: Walmart de México y Centroamérica opera 2 mil 722 unidades comerciales, de las cuales 2 mil 101 se encuentran en México y 621 en los cinco países centroamericanos. En México tiene mil 215 Bodegas Aurrera, 213 Walmart, 126 Sam’s Club, 88 Superamas, 94 Suburbias y 365 restaurantes. Mientras que en Centroamérica están establecidas 452 tiendas de descuento, 96 supermercados, 17 Walmart, 54 bodegas y dos clubes de precio. Ahora, el gobierno mexicano está obligado a investigar y responder por las acusaciones legales que se establecieron en Estados Unidos. José Antonio Meade, secretario de Hacienda, expuso el gobierno ya está en busca de elementos para determinar la forma en que se podría procedes ante los señalamientos de que Wal-Mart pagó “mordidas” a funcionarios públicos para convertirse en una cadena dominante en México. “No tenemos suficientes elementos y una vez que los tengamos tomaremos le decisión de cómo debemos de proceder”, declaró Meade a la prensa. Sin embargo, esta nueva denuncia de corrupción corporativa revive las que a diario se realizan en México, y no sólo por pleitos de dominancia entre los grandes consorcios, sino también las que hace ciudadanos comunes que se atreven a denunciar a las autoridades abusos, incumplimiento de contratos, tarifas excesivas, dobles o triples cobros, etcétera, de los monopolios que ahogan la economía de las familias en el país y que, encima, lo hacen con la venia del gobierno.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario