Gasolina, coches y monopolio
Antonio Gershenson
Varias organizaciones preocupadas por el ambiente han hecho pública la intención gubernamental de volver a postergar, ahora hasta 2015, la distribución de diesel con bajo azufre. El documento en ese sentido, aún no publicado en el Diario Oficial de la Federación, pero que ya circula y cuyo conducto inicial fue el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (Ifai), lo emitirá la Secretaría de Energía.
Hace más de tres años que Petróleos Mexicanos (Pemex) ha incumplido con la distribución de combustibles bajos en azufre. El gobierno de Felipe Calderón pretende seguir retrasando el cumplimiento de la Norma Oficial Mexicana 086. Desde febrero de 2009, según esta norma, se debería estar distribuyendo diesel de ultra bajo azufre (UBA) en todo el país. Ahora, en el documento mencionado se decreta, como nueva fecha marzo de 2015. El uso prolongado de más azufre en los combustibles ha dañado la salud, el empleo y la competitividad del país.
Queremos señalar que no sólo se está dañando el ambiente con todas sus consecuencias. Se está prolongando la vida de un monopolio controlado por funcionarios del gobierno federal, beneficiados por fabricantes de automóviles con motor de gasolina, compradores de gasolina para Pemex y demás. También se benefician fabricantes y operadores de carreteras. En ese sentido, estamos atrasados en relación con una gran cantidad de países.
Ahora subieron la gasolina magna a 10 pesos, pero el diesel lo aumentaron a 10.60. Y éste se usa, con todo su azufre, para camiones de cierto tamaño para arriba, tractores y otros vehículos. La comida y muchos otros bienes que requieren transporte, aumentan de precio también.
Ya hemos mencionado que en Europa se fabrican coches con motores a diesel, y que se venden más que los de motor a gasolina. También en países de Asia, por ejemplo Japón, China e India. Aquí no se pueden vender o comprar, porque el diesel que vende Pemex no cumple con las normas, y eso porque no quiere, pues las plantas para ello se quedan sin construir o a medias.
La razón por la que en otros lados el motor diesel para coche desaloja al de gasolina es porque es más eficiente y el combustible es más barato. Aquí, por decreto, se volvió más caro el diesel, cuando que era al revés.
Tampoco se quiere reducir el azufre al combustóleo. La CFE importa combustóleo con bajo contenido de azufre, porque con el concurso, viene la lana. De común acuerdo, Pemex sigue produciendo combustóleo con mucho azufre, para que siga el negocio.
Mientras tanto, nuestros pulmones y en general nuestra salud, tienen que pagar por el diesel y el combustóleo con mucho azufre.
No sólo son el combustible y los coches. Recordemos que teníamos una red de ferrocarriles de pasajeros y de carga. Recordemos que cuando llegaron al poder los tecnócratas (entonces, del PRI), fueron desmantelando las redes férreas y privatizaron lo que quedó, con lo cual eludieron toda responsabilidad al respecto. Carreteras o nada. Gasolina o nada. Un enorme monopolio, un enorme negocio de trasnacionales y de funcionarios. Nada ha cambiado desde que llegaron los tecnócratas, PRI y PAN gobernando.
En el mundo, la extensión de los ferrocarriles es enorme. Ya hemos mencionado a Europa, que apunta a trenes de alta velocidad. Casi todos los países de Asia los tienen, incluso algunos con alta velocidad. Rusia, cuyo territorio se extiende por Europa y Asia, tiene una enorme red. El mayor ferrocarril del mundo, el Transiberiano, inició su construcción en el siglo XIX. En América Latina países como Argentina tienen grandes redes ferroviarias.
Los trenes consumen mucha menos energía que los camiones por pasajero transportado, menos que los aviones y todavía menos que los coches. En la actualidad, hay un alto porcentaje de ferrocarriles eléctricos y también de doble vía (para ida y vuelta).
Cuando en 2008 estalló la crisis mundial, en China se acordó llegar a 40 nuevas rutas férreas de alta velocidad. Fue una parte importante de las medidas para derrotar a la crisis.
Países de Asia central, que no tienen salida al mar, tienen 80 por ciento de su comercio exterior por tren.
Se está construyendo gradualmente una gigantesca red férrea en Asia. Como hay diferentes anchos de vía, se usan los llamados puertos secos. En cada uno de estos puertos, hay dos vías paralelas, una de cada ancho de las que van a coincidir en este puerto. Se mueven las cargas, en especial por vagón completo, con grúas, de un ferrocarril al otro, de una vía a la otra.
Los tecnócratas y la derecha nos regresaron al pasado. Todo lo que en otras partes del mundo ya es normal lo vamos a tener que volver a construir. Lo que no tenenemos, como los coches con motor a diesel o los ferrocarriles de alta velocidad, pues tendremos que desarrollarlos desde el principio.
Claro, antes tenemos que sacarlos del gobierno. Está cercana la elección general. Dejarlos, sea como PRI o como PAN, sería condenarnos a otro sexenio en un pasado cada vez peor.
antonio.gershenson@gmail.com
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