En concreto
Laura Itzel Castillo
Presupuesto indigno
La Cámara de Diputados aprobó ayer por la mañana el Presupuesto de Egresos de la Federación 2011, después de casi 13 horas de debate. La sesión plenaria había iniciado el día anterior, y su prolongación se debió a las 82 reservas que varios diputados y diputadas hicimos para que se votaran en lo particular diversos artículos y anexos. Lamentablemente, la mayoría de esas reservas fueron rechazadas por el PRIAN y sus paleros.
Lo que sí quedó aprobado fue la reasignación de 47 millones de pesos para otorgar seguridad social a mil 200 trabajadores y asesores que laboran en San Lázaro, al igual que un incremento al monto planteado originalmente por la Secretaría de Hacienda (la cifra pasó de 300 a 1,200 millones de pesos) para restituir a ex braceros una mínima parte de los ahorros que acumularon durante las décadas de los 40, 50 y 60 del siglo pasado, los cuales fueron robados por el gobierno mexicano y/o algunos de sus funcionarios. De esta manera, el presupuesto alcanzó un monto de 3 billones 438 mil 895 millones 500 mil pesos.
El resultado estuvo lejos de ser satisfactorio, pues la propuesta venía viciada de origen. El proceso de negociación del presupuesto 2011, que se había efectuado previamente en comisiones, estuvo lleno de contradicciones, paradojas, turbiedad y prepotencia. Al final, no hubo austeridad en el gasto público ni tampoco recursos suficientes para las grandes necesidades sociales, como era lo deseable y exigible.
En contraparte, las familias más poderosas del país, al igual que las trasnacionales, continuarán disfrutando de sus privilegios por obra y gracia de este gobierno entreguista y abyecto, y de una mayoría de diputados agachones, que no tienen pudor alguno de mostrar su columna vertebral gelatinosa.
Sólo 13 nos opusimos. Van los nombres para que quede constancia: por el PT, Teresa Guadalupe Reyes, Porfirio Muñoz Ledo, Enrique Ibarra, Gerardo Fernández Noroña, Mario Di Costanzo, Jaime Cárdenas y Laura Itzel Castillo; por el PRD, Ramón Jiménez, Balfre Vargas, Adán Augusto López y Rosendo Marín; por el PRI, Miguel Ángel García y Francisco Ramos.
Los demás, por las razones que fuere, votaron a favor del presupuesto de egresos de la Federación para 2011 y con ello avalaron un incremento salarial de 23.75% al usurpador Calderón, quien percibirá mensualmente 148 mil 263 pesos, más 50 mil 607 de prestaciones, para totalizar 198 mil 870 pesos. El aumento —casi seis veces mayor al tope salarial impuesto por Los Pinos para la sociedad en general—, también lo gozará la alta burocracia, lo cual resulta absolutamente indigno e indignante.
En suma, lo que ocurrió en San Lázaro fue una abdicación de la obligación del Congreso de conocer, vigilar, cumplir y hacer cumplir la Constitución.
El PRIAN le brindó un cheque en blanco al usurpador Calderón y a su jefe superior Carlos Salinas. Pobre país.
Laura Itzel Castillo
Presupuesto indigno
La Cámara de Diputados aprobó ayer por la mañana el Presupuesto de Egresos de la Federación 2011, después de casi 13 horas de debate. La sesión plenaria había iniciado el día anterior, y su prolongación se debió a las 82 reservas que varios diputados y diputadas hicimos para que se votaran en lo particular diversos artículos y anexos. Lamentablemente, la mayoría de esas reservas fueron rechazadas por el PRIAN y sus paleros.
Lo que sí quedó aprobado fue la reasignación de 47 millones de pesos para otorgar seguridad social a mil 200 trabajadores y asesores que laboran en San Lázaro, al igual que un incremento al monto planteado originalmente por la Secretaría de Hacienda (la cifra pasó de 300 a 1,200 millones de pesos) para restituir a ex braceros una mínima parte de los ahorros que acumularon durante las décadas de los 40, 50 y 60 del siglo pasado, los cuales fueron robados por el gobierno mexicano y/o algunos de sus funcionarios. De esta manera, el presupuesto alcanzó un monto de 3 billones 438 mil 895 millones 500 mil pesos.
El resultado estuvo lejos de ser satisfactorio, pues la propuesta venía viciada de origen. El proceso de negociación del presupuesto 2011, que se había efectuado previamente en comisiones, estuvo lleno de contradicciones, paradojas, turbiedad y prepotencia. Al final, no hubo austeridad en el gasto público ni tampoco recursos suficientes para las grandes necesidades sociales, como era lo deseable y exigible.
En contraparte, las familias más poderosas del país, al igual que las trasnacionales, continuarán disfrutando de sus privilegios por obra y gracia de este gobierno entreguista y abyecto, y de una mayoría de diputados agachones, que no tienen pudor alguno de mostrar su columna vertebral gelatinosa.
Sólo 13 nos opusimos. Van los nombres para que quede constancia: por el PT, Teresa Guadalupe Reyes, Porfirio Muñoz Ledo, Enrique Ibarra, Gerardo Fernández Noroña, Mario Di Costanzo, Jaime Cárdenas y Laura Itzel Castillo; por el PRD, Ramón Jiménez, Balfre Vargas, Adán Augusto López y Rosendo Marín; por el PRI, Miguel Ángel García y Francisco Ramos.
Los demás, por las razones que fuere, votaron a favor del presupuesto de egresos de la Federación para 2011 y con ello avalaron un incremento salarial de 23.75% al usurpador Calderón, quien percibirá mensualmente 148 mil 263 pesos, más 50 mil 607 de prestaciones, para totalizar 198 mil 870 pesos. El aumento —casi seis veces mayor al tope salarial impuesto por Los Pinos para la sociedad en general—, también lo gozará la alta burocracia, lo cual resulta absolutamente indigno e indignante.
En suma, lo que ocurrió en San Lázaro fue una abdicación de la obligación del Congreso de conocer, vigilar, cumplir y hacer cumplir la Constitución.
El PRIAN le brindó un cheque en blanco al usurpador Calderón y a su jefe superior Carlos Salinas. Pobre país.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario