miércoles, septiembre 29, 2010

VIRGINIA GONZÁLEZ MELGAREJO : Combatir los monopolios

Combatir los monopolios
VIRGINIA GONZÁLEZ MELGAREJO

 
Mucho se ha dicho de lo pernicioso que resultan para un país los monopolios, y que a pesar de estar plasmada en la Constitución en su artículo 28 la prohibición expresa de estas prácticas, vemos como las empresas monopólicas imponen su ley en el mercado, y los mexicanos nos vemos en la indefensión ante los altos precios de bienes y servicios que son ofrecidos a los ciudadanos, además, con una pésima calidad.

La telefonía, el servicio de televisión abierta y por cable, el internet, el uso de tarjetas de crédito, cemento, el pan del osito y Wal Mart, entre otros, son grandes monopolios privados que controlan la economía del país. Sus productos tienen para los mexicanos un costo mucho más alto que el que se paga por ellos en otros países. Estos precios excesivos reducen severamente el poder adquisitivo y nulifican el ahorro de las familias mexicanas.



Las grandes empresas monopólicas se encuentran vinculadas estrechamente con el poder político y reciben de éste grandes beneficios, a cambio de seguir administrando la ignorancia de la mayoría de la población del país, avalar fraudes electorales y difundirán la visión mentirosa de lo maravilloso y lo bien que nos gobiernan. En contraparte, estas empresas reciben del gobierno en turno la dispensa de impuestos o su participación en jugosos negocios, como recién ocurrió con la entrega a Televisa–Nextel de 30 megahertz del espectro radioeléctrico a un precio irrisorio que les permitirá ofrecer los servicios de televisión, telefonía e internet, conocido como triple play, por 20 años, lo cual representará para la empresa una ganancia multimillonaria; además, para poder llevar a cabo todo este enjuague no les importó echar a la calle a más de 45 mil trabajadores que operaban la compañía de Luz y Fuerza del Centro, y que valientemente se oponían a un nuevo atraco a la nación.

El Nuevo Proyecto Alternativo de Nación, en su apartado 6, propone acabar con todos estos abusos, combatir frontalmente estas practicas y permitir una verdadera libre competencia, que redundaría en la baja de precios para los consumidores y mayor empleo, ya que se daría cabida en el mercado a las pequeñas y medianas industrias.


No hay comentarios.: