The beautiful country (o el sueño tecnócrata del 2%), Ricardo Andrade Jardí escribió este artículo

The beautiful country (o el sueño tecnócrata del 2%)

Ricardo Andrade Jardí

Y ahora resulta que el pretendido impuesto al 2el consumo, no es igual para todos, no. Aquellas “inmensas mayorías” que puedan comprar auténtica plata y oro y bienes raíces estarán exentos del impuesto. Mientras las “pocas minorías”, que se ven obligadas a comprar genéricos, y productos básicos de primera necesidad, estarán igualmente obligadas a pagar además del IVA, el 2ás al consumo, “por pobres y renegados”.


Así pues funciona el sueño de país de nuestra usurpadora derecha.
Más de 25 millones de mexicanos —con cifras oficiales— viven en condiciones de pobreza extrema por lo que tendrán que pagar el 2or todo lo poco que consuman.
Mientras poco menos de un millón de personas dueños de toda la riqueza estarán exentos de ese 2ada vez que adquieran artículos de lujo y banalidades que los enajenan en su mediocridad y falso confort por lo que pagamos el resto.
Podemos suponer que los pobres en miseria extrema tan sólo reducirán su consumo ante la imposibilidad física (real) de pagar 2ás, mientras la desaparecida clase media asume su condición de nueva pobreza y pagan por su osadía de involuntaria proletarización con un nuevo impuesto al consumo supuestamente destinado a los “programas de combate a la pobreza” al que más de 24 millones de mexicanos no tienen acceso pese a su condición de extrema pobreza.
Así que ya se sabe, comprar joyería o un avión o 20 mil metros de virgen selva maya son la receta para evitar el 2l consumo. Por lo que los caminos a seguir son tres: A) corrompernos y como Juanito prometer algo que no cumpliremos, es decir hacernos políticos, a la mexicana, en clara demostración de que la voluntad popular es menos que basura. B) Pegarle al narcotráfico y lavar nuestra fortuna comprando joyas o propiedades o C) Afiliarnos al crimen empresarial organizado siempre que podamos entrar en los absolutos beneficios del FOBAPROA.
Es decir hacernos “gente de bien” siguiendo el moderno manual de buenas costumbres “Quítate tú para imponerme yo”, complementado por el internacional book “defendiendo el mercado libre de hamburcolademocracia occidental”, editado, hasta en español, para aquellos que apenas inician en el seguro camino del éxito, por el FMI y la OMC, aunque es “más mejor” leerlo “en inglich”, pues es uno de los pasos fundamentales de distinción entre los elegidos del sistema teletón y los come nopales frijoleros tortilleros que hacemos el montón de fricks que afean el country nacional.
¡Qué bonito sería todo para el neoliberal PRIAN si no existieran los mexicanos, que sólo quieren ser mexicanos!