http://www.sinembargo.mx/14-09-2012/365251
Fundado en 1939 bajo principios humanísticos y éticos por Manuel Gómez Morín, el Partido Acción Nacional (PAN) se enfrenta a una severa crisis que se engrandece como una bola de nieve a menos de 100 días de que su Presidente, Felipe Calderón, entregue el poder a Enrique Peña Nieto, del PRI. Tras la dura derrota del 1 de julio, ya nada ha sido igual. Han salido a flote las inconformidades de los militantes, y uno de los personajes más cuestionados es justamente Calderón, a quien se le acusa de querer mantener el poder que ejerció durante 6 años, con mano dura, dentro del PAN. Esto ha ocasionado severas pugnas internas que han debilitado aún más a un partido que ha pasado a una tercera fuerza electoral después de haber logrado la proeza de sacar al PRI de Los Pinos luego de 70 años en el poder…
LA DERROTA DEL 1 DE JULIO
La noche del 1 de julio, en la sede nacional del PAN, la candidata presidencial Josefina Vázquez Mota reconoció que los resultados no le favorecían con tan sólo 25.47 por ciento de los votos. Hizo ese anuncio igual que como la dejó su partido: sola. Con tropiezos, errores, presuntamente distanciada del Jefe de Estado y hasta con un “golpe de timón”, la campaña de la panista se derrumbó desde antes de su derrota.
Para muchos se trató de un “fracaso anunciado” que sólo el propio blanquiazul se negaba a aceptar, lo cierto es que el pasado proceso electoral dejó a ese ente político sumido en la polémica y ubicado como “la tercera fuerza política” por detrás del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Dos días más tarde, Vázquez Mota anunció que estaría al frente de un movimiento con los ciudadanos que votaron a su favor y expresó que “esto no es el final, sino apenas el principio de un gran movimiento que voy a encabezar”, pero desde entonces su presencia ante los reflectores ha sido prácticamente nula.
Para muchos expertos, detractores y hasta panistas, la falta de sufragios para ella se debieron al “voto de castigo al PAN”, debido, principalmente, al desempeño de Calderón al frente del Ejecutivo que ha encabezado una lucha anticrimen que heredará más de 60 mil muertos.
Pasaría más de un mes para que Calderón hablara por vez primera de la “responsabilidad compartida” en la derrota en los comicios federales.
El 11 de agosto pasado, reiteró que “todos en el PAN fallaron durante la pasada campaña”. También pidió a sus compañeros de partido salir “de este momento de reproche y de lamento” ya y decidirse de inmediato “a tener el partido que queremos, el PAN que México necesita y merece”.
DIRIGENCIA PANISTA, EN PUGNA
El 22 de julio el periódico Reforma reveló en un amplio reportaje que el Presidente lanzó una ofensiva para quedarse con Acción Nacional.
“En días laborales, algunas veces en Los Pinos y otras aprovechando giras oficiales de trabajo, el primer mandatario se ha reunido con decenas de panistas para discutir las causas de la derrota y el rumbo que deberá tomar el partido”, señaló el diario, que también informó que la operación comenzó desde el 2 de julio.
“Continuó el martes 3, en una comida de casi cuatro horas con la ex candidata Josefina Vázquez Mota; los gobernadores panistas de Baja California, Baja California Sur, Guanajuato, Jalisco, Morelos y Sonora; los ex dirigentes Luis H. Álvarez, Luis Felipe Bravo Mena, Germán Martínez y César Nava; los líderes parlamentarios José González Morfín y Carlos Alberto Pérez Cuevas; el dirigente, Gustavo Madero; el ex coordinador de la campaña Roberto Gil; el ex precandidato Ernesto Cordero; el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré; además de Diego Fernández de Cevallos, Pancho Barrio, Alberto Cárdenas, Juan Manuel Oliva y Tarcisio Rodríguez”, detalló el diario capitalino.
Según Reforma, panistas que prefirieron guardar el anonimato dieron a conocer que el Presidente repartió culpas, regañó y advirtió que refundaría el partido con o sin ellos.
Por un lado los calderonistas dieron muestras de querer lograr los votos suficientes que les permitan destituir a Gustavo Madero y debilitar a sus simpatizantes. Mientras que los maderistas, a su vez, intentan conservar su hegemonía.
LA “REFUNDACIÓN” DEL PAN
Felipe Calderón aseguró el 5 de julio que ante la derrota sufrida por su partido “hay que refundar” la institución.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva para Milenio, Calderón aseveró:
Yo afirmo y creo que hay que refundar al PAN, hay que reconstruirlo desde los cimientos hasta la cúpula, piedra por piedra. Eso implica una labor titánica que me parece que debemos emprender todos los que queremos, no sólo queremos al PAN, sino que sabemos que es una opción necesaria en la vida política de México. En sus ideas, en sus principios, en su historia, en su compromiso democrático, en lo que hizo por el país, el PAN fue, finalmente, no el único, pero sí un protagonista y un impulsor principalísimo en la vida democrática en México. Cambió la historia sin disparar un tiro, y eso no puede quedarse así, no vamos a dejarlo así.
Durante la charla, el periodista le preguntó si considera que el resultado de la elección era un castigo de los votantes al desempeño de su gobierno, a lo que el mandatario respondió:
De alguna manera, en lo que al gobierno toca, sí afirmo que la responsabilidad es compartida y que son muchos factores, y que uno de ellos es lo que la gente siente. Y la gente, para decirlo en pocas palabras, probablemente mucha gente no cumplió sus expectativas que tenía puestas en el gobierno y votó por otras opciones. ¿Fue ese el único factor? No lo fue. ¿Fue el determinante? No lo creo, pero, ¿fue un factor? Sí, sí lo fue. Y por qué no cumplió este gobierno esas expectativas para esos electores, para muchos otros sí. Puede ser por varias razones. Una es por falta de logros o por falta de resultados. Otra puede ser por una falta de capacidad para transmitir esos resultados, esos logros, o puede ser una mezcla de las dos cosas.
En respuesta, el 7 de julio, el líder del PAN, Gustavo Madero, consideró que la derrota sufrida por su partido “es una responsabilidad compartida y no de una persona”, por lo que no se resolverá con un cambio de dirigencia o con renuncias.
Días más tarde, Madero Muñoz expresó vía Twitter: “No es refundarse lo que necesita el PAN porque sus cimientos son los mejores”. Sin embargo, hizo un reconocimiento a la labor del Presidente, a quien consideró un gran activo para Acción Nacional.
Pero el 11 de agosto Calderón volvió al tema y ante el Consejo del Partido Acción Nacional, pidió una profunda transformación del mismo para “que vuelva a ganar las elecciones presidenciales en el año 2018″.
“SE REBELAN” CONTRA FCH
Tras las primeras y grandes muestras de un debacle panista, el 4 de agosto El Universal dio a conocer que presuntamente un grupo de 23 dirigentes estatales del PAN creó un frente contra Felipe Calderón y su propuesta para que la Asamblea Nacional Extraordinaria -en la que se reformarán estatutos del partido- se lleve a cabo este año.
Con esto, rechazaron el planteamiento de “refundación desde los cimientos” del blanquiazul realizada por el Ejecutivo Federal.
Según el rotativo, los inconformes firmaron un documento titulado “Reivindicación histórica”, en el que se establece que tras perder el tercer periodo presidencial, Acción Nacional no se debe “apresurar” en su proceso de reflexión y exigieron una consulta en todos los niveles para establecer el futuro del órgano político.
Entre los “rebeldes”, supuestamente está el gobernador con licencia Juan Manuel Oliva.
VICENTE FOX, EL PANISTA INCÓMODO
Fox es uno de los panistas que más ha criticado la política calderonista, sobre todo su lucha contra el narco.
El 23 de abril de 2012, en declaraciones a Pedro Ferriz de Con, el exmandatario dijo que el costo de dicha guerra ha sido muy alto y como prueba de ello “la imagen del país está hecha pedazos y es pésima”, en el extranjero. Esta postura ha perdurado y tras la validación de Enrique Peña Nieto como Presidente electo, Fox lo exhortó a “terminar la guerra inútil” que deja la administración encabezada por Felipe Calderón.
Por otro lado, parece que su ideología política se ha inclinado a favor del tricolor, pues desde el 14 de diciembre de 2011 comenzó a dar muestras de apoyo en favor del priista, cuando lo defendió de Carlos Fuentes, quien aseguró que el mexiquense no tenía derecho “a ser Presidente de México a partir de la ignorancia”.
Meses más tarde, el 11 de abril de 2012, Fox se expresó sobre el exgobernador del Estado de México, al augurar que con la ventaja que mantenía el candidato sobre Josefina Vázquez Mota y Andrés Manuel López Obrador, prácticamente estaba “ganada esta elección”. Ese mismo día, Peña Nieto agradeció al panista, ”que es una persona que sabe”, el apoyo brindado y su vaticinio.
Sin embargo, 14 días después, el guanajuatense se reunió en privado con Vázquez Mota en lo que se calificó como “una muestra de unidad”. En el encuentro, el exmandatario se refirió a la candidata como “Mi Presidente Josefina, mi Presidente Vázquez Mota”, pero esta actitud le duró muy poco.
En plena campaña presidencial, Fox pidió apoyar al “candidato puntero”.
El 19 de junio pasado, durante una conferencia transmitida por internet, aseguró que según las encuestas el aspirante presidencial del tricolor llevaba una ventaja de 15 puntos, por lo que ”este arroz ya se coció”.
Obviamente su aún partido no se quedaría cruzado de brazos y arremetió contra él, calificándolo de cínico, cobarde, miserable, convenenciero y porro de Peña Nieto. En tanto, el 9 de julio, la secretaria general de Acción Nacional, Cecilia Romero, dio a conocer que con sus declaraciones, “Fox está automáticamente fuera del PAN”, mensaje que fue secundado por el excoordinador general de la campaña presidencial, Roberto Gil Zuarth.
El 24 de julio, el Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional en Guanajuato analizó la posible expulsión o sanción contra el expresidente, acto que se esperaba ocurriera poco después de los comicios, pero hasta la fecha no se ha hecho de manera oficial.
EL PRESUNTO APOYO AL EPN
El diario La Jornada dio a conocer el 3 de septiembre el video “Voces y acciones de la LXI”, en el que panistas dan sus opiniones sobre figuras representativas del PAN, las elecciones pasadas, el futuro del órgano político, entre otros.
La grabación destaca juicios de algunos militantes del blanquiazul que señalan que el triunfo de Enrique Peña Nieto como Presidente de México fue pactado por Felipe Calderón desde 2006.
Por ejemplo, entre las declaraciones se encuentra la de Gumercindo Castellanos, exlegislador por Jalisco, quien señala que en su estado muchos creen que la elección de 2012 se negoció en 2006.
“No quiero opinar al respecto, pero tampoco lo dudo, plantea, y señala la sospecha de que Calderón prefirió entregar la Presidencia al priísta que a López Obrador”, dice.
El material se desarrolló a iniciativa de Carlos Alberto Pérez Cuevas, jefe del PAN en la anterior legislatura de la Cámara de Diputados y fue grabado por Alejandro González Padilla, cineasta y publicista de Josefina Vázquez Mota en la campaña interna.
JOSEFINA EVITA AL PRESIDENTE
El 4 de septiembre pasado, la revista Proceso publicó en su página de Internet que durante el homenaje póstumo que se rindió un día antes al empresario Roberto González Barrera –fundador del Grupo Maseca y accionista mayoritario del Grupo Financiero Banorte–, y que reunió a buena parte de la clase política nacional en el Museo Nacional de Antropología, Josefina Vázquez Mota evitó cruzarse con el Presidente.
“Antes del inicio formal de la ceremonia, encabezada por el Presidente Felipe Calderón, las miradas convergieron en una tempranera Josefina Vázquez Mota –excandidata presidencial panista–, que no había hecho aparición pública alguna desde la semana misma de las elecciones del 1 de julio pasado. Vaya, ni siquiera fue, en la mañana, al acto público donde el Presidente emitió un discurso a propósito de su Sexto Informe de Gobierno”, dice la crónica de Carlos Becerra.
Agrega: “Pero, en la noche, ahí estaba, en la segunda fila, a unos cuantos asientos del Presidente Calderón, con quien no cruzó palabra. En el otro extremo, la archienemiga de Vázquez Mota: la maestra Elba Esther Gordillo, que también acaparó las miradas de los asistentes, unos 500”.
Por su parte, Milenio indicó que la panista no quiso hacer declaraciones sobre su ausencia en el mensaje del Jefe del Ejecutivo.
-Ahora no se trata de dar declaraciones, vengo a acompañar a un buen amigo”, expresó, según el rotativo.
-¿El de la mañana no era su amigo?
-No he dicho nada.
CONTRADICCIONES
El 9 de septiembre, al término de su participación en la XX reunión Cumbre de Líderes del Mecanismo de Concertación Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés), Calderón, quien se definió como un demócrata, afirmó que el único apoyo que pudo darle a Vázquez Mota en las pasadas elecciones fue su simpatía y su voto.
Asimismo reconoció que dentro del PAN “algunos compañeros hubieran querido que el apoyo del gobierno hubiese ido más allá de los límites legales”, pero “yo no acepté eso, yo sabía que había que conducirse dentro de los cauces de la ley, sin la utilización de fondos públicos”.
Sin embargo, dos días más tarde, Gustavo Madero negó que la fuerza política que dirige haya pedido al mandatario recursos públicos para apoyar la campaña de su candidata a la Presidencia del país.
“No conozco que alguien haya solicitado eso al Presidente Calderón, no puedo argumentar sobre algo que desconozco. Sin duda no fue el partido quien lo hizo, y si fue así, él es el que puede decirnos de dónde vino la solicitud. Es el único comentario que puedo hacer”, señaló.
EL CASO JAVIER CORRAL
Luego de que presuntamente el 28 de agosto pasado Felipe Calderón tachara de “cobarde” a Javier Corral por no asistir a una reunión con la bancada de senadores, el legislador emitió una carta dirigida al Jefe del Ejecutivo.
En la misiva difundida el 12 de septiembre, el senador panista llama a Calderón de la misma manera y también le dijo “colérico”.
Al llamarme cobarde ante los senadores y estando yo ausente, te has pasado de la raya. Pero podemos aprovechar tu desahogo discutiendo nuestras diferencias cuando quieras, en donde quieras y ante quien quieras”, le responde en el documento.
Corral añade que el regreso del PRI evidencia el fracaso de Calderón como Presidente.
“Este primero de diciembre le vas a entregar en San Lázaro la banda presidencial a Peña Nieto. La misma que recibiste de Vicente Fox. Un retorno del PRI es una amenaza que todos percibimos. Lo sabes bien, ese momento condensará como ninguna crítica o análisis, tu fracaso”, dice.
También le habla de su caracter: “Espérate a que conozcas la condición humana a partir de que dejes el poder y entiendas que lo que más te ha perjudicado eres tú, tu carácter colérico al que le gana el coraje en cualquier momento…”
Un día después de la polémica, Corral afirmó que se opone terminantemente a un “Maximato calderonista”. Y es que según él, el Jefe de Estado busca entrometerse en todos los asuntos del blanquiazul.
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