Manipulación de los medios
Por: Virginia González Melgarejo
Si alguien dudaba de la
manipulación de los medios de comunicación masiva para favorecer la imagen y
candidatura de Enrique Peña Nieto, lo sucedido en la Universidad
Iberoamericana, el pasado viernes, seguramente le quitó la venda.
El asunto le ha dado la
vuelta al mundo, pero no por los reportes ofrecidos en Televisa y TvAzteca o
buena parte de la prensa escrita, sino por las redes sociales, Facebook y Twitter, donde se
dio cuenta, casi minuto a minuto y a detalle, de lo que en realidad estaba
ocurriendo en la institución, información que contrasta de manera casi ofensiva
con lo que se vio y leyó al día siguiente en los medios oficiosos de
comunicación.
No es de sorprender que
ese clima de rechazo hacia Peña Nieto se haya dado entre un auditorio de
jóvenes universitarios informados y politizados, hasta aquí todo parecería
normal, son jóvenes, son universitarios capaces de manifestar sus
inconformidades. Lo verdaderamente indignante fue leer al día siguiente en todos
los periódicos de la OEM del señor Mario Vázquez Raña, en las ocho columnas:
“Éxito de Peña en la Ibero pese a intento orquestado de boicot”. Lo ordenado
por el señor Vázquez Raña en sus diarios se aparta totalmente de la verdad,
llamó a los universitarios “un puñado de porros pagados”, nada más grave e
injusto; a su vez, las televisoras hicieron lo propio minimizando la protesta
contra Peña, reduciéndola a “una veintena de pseudoestudiantes que únicamente
obedecían órdenes”, tratándolos como individuos poco pensantes.
Valorar un hecho de
diferente forma es válido, pero las versiones que se dan por la televisión y en
algunas estaciones de radio y la mayor parte de los diarios, al faltar a verdad
faltan también a la ética y muestran una evidente manipulación de la
información a tal grado de tergiversar completamente lo sucedido.
Paulatinamente la gente
se va dando cuenta de que los medios son capaces de operar coordinadamente para
falsear la realidad proporcionando información distorsionada que llega a miles
de hogares, lo cual es sumamente grave. ¿Qué persiguen con esa conducta? ¿A
cambio de qué lo hacen? En realidad son parte del poder, por eso apartándose de
toda ética profesional se convierten en esbirros de quien aspira gobernar al
país, lo cual resulta bastante siniestro e inadmisible. Por eso, el uso de las
redes sociales en un entorno como el que vive actualmente el país permite de
alguna manera desenmascarar a quienes sin duda alguna quieren imponer de nueva
cuenta un presidente a costa de lo que sea. Sólo resta a juicio personal hacer
una valoración de lo sucedido y sacar conclusiones, no sin antes recordar que
el cambio verdadero, ahora más que nunca, está en nuestras manos.
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