Tetas que anuncian la crónica de lo que viene : María Teresa Jardí

María Teresa Jardí

Tetas que anuncian la crónica de lo que viene

Si a alguien le queda la menor duda de que lo que se cocina en México es otro fraude para imponer al que mejor garantice que las televisoras se conviertan ya de plano en el poder político del país, ahí está para entenderlo, la decisión del Poder Judicial, electorero, que tenemos. Un Poder de importancia vital para la democracia. Pero aquí convertido en servidor de la derecha televisiva con el nombramiento de un presidente a modo, hermano de la más impresentable, siendo impresentables casi todos los ministros componentes de un Poder Judicial que dejó de ser, desde Zedillo, impartidor de justicia, para convertirse en vividor de la misma, a cambio de resolver a modo del sistema que se aplica. A lo que debieron, por cierto, referirse los candidatos, también ejecutados con unas tetas.
Tetas que a final de cuentas es lo que queda del “debate”. Lo que era, como es obvio, lo que se buscaba al hacer pasar, como en pasarela televisiva, a la modelo vestida al estilo de las francachelas que Berlusconi se organizaba en Italia.
Algunos dicen que el ganador del debate fue Calderón porque ninguno se refirió a los miles de ejecutados. Y, sí, si tuviera más seso el bueno para Calderón sería también AMLO. La obsesión vengativa de AMLO se acaba en Carlos Salinas.
Es inconcebible pensar en cómo se ha dejado que se llegue al punto de que las televisoras obliguen al IFE, usando al Tribunal, a no dar a conocer el conteo rápido, que sí dará a conocer la telebasura nombrando como ganador al que mejor les garantice la conversión en poder político. Y claro, ahí AMLO lo tiene todo perdido.
El mensaje de lo que viene está en la vestida de noche para una pasarela o para ir a una francachela de ricos.

Logrando además, como buscaba la telecracia, debidamente puesta de acuerdo con el IFE, pidiendo un perdón que lo convierte, si cabe, en aún más patético. O peor por encima del IFE como queda claro. Que incluso el análisis del debate se minimice frente al análisis del buen culo y las buenas tetas.
Cuando el avance de la tecnología permite en el mundo incluso el ir mostrando el voto en el momento en que se emite, el tribunal electorero decide que en México el IFE no dará a conocer el conteo rápido. Dejando en manos del nuevo poder político que dé a conocer como ganador al que le cuadre. Con lo que quedará convertida la telecracia en el único poder político que tendremos en México.
Lo que ocurre en el país es inaudito y es de agradecer que AMLO se refiera al pasado como punto de partida de lo que hoy tenemos. Pero no es Salinas el único responsable.
Desde Echeverría se puede analizar el papel jugado por cada impresentable gobernante a la mexicana como ejecutor de lo ordenado por el imperio yanqui. Y desde luego no pueden quedar fuera de ese análisis ni las canalladas de Zedillo ni las de Fox ni las de Felipe Calderón y menos aún deben ser perdonadas.
La ausencia de claridad de todos los candidatos, por lo que toca a lo que hay que hacer para enfrentar la violencia desatada, da buena cuenta de lo difícil que va a ser la tarea incluso si llega AMLO, que es el que mayor claridad tiene con respecto al problema. Está en la prevención sobre el consumo de las drogas, todas, incluido el alcohol, la posibilidad única de convertirnos, de sociedad enferma, en sociedad sana. Y este presupuesto es indispensable para hacer regresar a los valores como el punto de partida de la vida social en aras del zurcido del deteriorado tejido social.