Por: www.sinembargo.mx
Todavía hace unas semanas, hasta la manifestación de estudiantes el “viernes negro” de Enrique Peña Nieto en la Universidad Iberoamericana, había una percepción de que el candidato del PRI a la presidencia de la República había logrado captar, íntegro, el voto de los jóvenes.
Pero después de esa protesta, y tras una cadena de errores cometidos por el mismo PRI –las amenazas en Twitter contra estudiantes, el llamarlos “porros” y “acarreados–, esta percepción ha cambiado. Los mismos alumnos de universidades, principalmente privadas, lograron revertir esta creencia, resumiendo las expresiones de apoyo hacia Peña Nieto a Twitter.
El problema para el PRI es que hay serias dudas de que el apoyo que recibe el candidato priista en Twitter sea real. Los ejercicios realizados por los mismos tuiteros e incluso por varios medios –incluyendo a Univisión– han puesto en duda el tamaño del apoyo que tiene Peña Nieto en redes sociales.
Frente a las marchas de apoyo estudiantil en contra de EPN, las manifestaciones de apoyo para Andrés Manuel López Obrador, y ejercicios como el “simulacro de elección” realizado en la UNAM, la percepción de que los jóvenes se habían vuelto priistas cambió.
Ahora hay una clara lucha entre Peña Nieto y López Obrador por los jóvenes. No está totalmente sembrada la idea de que todos los jóvenes apoyan a AMLO, pero se ha quebrantado fuertemente la idea de que el priista tenía conquistado ese voto.
Y gran parte de la culpa de este cambio en las percepciones es que la estrategia del priista en redes sociales se volvió tan burda, que ahora se tiene una percepción de que “ectivistas” y otras redes de apoyo a EPN son simples manipuladores de tendencias.
Otra duda que ha crecido entorno al voto joven es: ¿Y Josefina Vázquez Mota? ¿Y Gabriel Quadri? ¿Qué papel juegan entre los jóvenes?
Según una encuesta dada a conocer por Grupo Reforma ayer domingo, el apoyo de los universitarios a Peña Nieto y a Vázquez Mota, cayó nueve puntos de marzo a abril.
En el mismo periodo, el voto a favor de López Obrador creció 16 unidades, dice Reforma.
Usted juzgue.
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La caída del general de división Tomás Ángeles Dauahare, de otros dos generales y un coronel, ha provocado un enorme daño al Ejército mexicano. No se recuerda algo similar en la historia moderna de esa institución, que ha disfrutado de un enorme prestigio entre los mexicanos.
El viernes pasado, el diario español El País ponía en la mesa dos grandes cuestionamientos: ¿Hasta dónde se ha metido el narco en el Ejército mexicano? Y otra: ¿Son reales los cargos contra los tres generales y el coronel, o es una purga política relacionada con el rechazo tan mencionado de cierto sector del Ejército a la guerra del presidente Felipe Calderón?
“La evidente connotación política de la operación conjunta Secretaría de la Defensa-Procuraduría General de la República pone aún más en entredicho la estrategia de Felipe Calderón de lanzar su guerra contra el narcotráfico exponiendo a los militares a los riesgos en los que inevitablemente han caído: la ineficacia, el fracaso, la corrupción o la violación a los derechos humanos”, dijo por su parte la revista Proceso ayer domingo.
Lo triste del caso, es que los mexicanos estamos presenciando desde hace unos pocos años cómo se vulnera a una de las Instituciones ejemplares de México.
“Creo que para el Ejército debe ser un momento sin duda muy desafiante”, dijo Josefina Vázquez Mota, candidata del PAN, en una entrevista de ayer domingo en EFE.
Y no sólo el Ejército: todo el país.
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