Adiós Peña Nieto y Josefina : Gilberto Balam Pereira

Mucho bunker pero cero votos

Gracias por haber participado
Gilberto Balam Pereira
Adiós Peña Nieto y Josefina 

Después del apoteósico mitin de apoyo ayer en el parque de La Mejorada al candidato presidencial AMLO, y por las fotografías que todos los días nos muestra nuestro diario POR ESTO! en otras similares concentraciones de ciudades de la República, así como las voces de los ciudadanos que transitan diariamente en las calles o que frecuentan lugares públicos, todas favorables hacia el tabasqueño, no nos queda otro remedio que dedicarle despedidas a los otros tres candidatos. Gracias por haber participado.
Nunca imaginaron los meridanos que el parque de La Mejorada, tradicional bastión panista, fuera a colmarse ayer como lo logró el arraigo popular, carisma y futuro programa de gobierno que representa El Peje en estos momentos. “Ahora sí, vemos aquí a los jóvenes contagiándonos de entusiasmo a los adultos”, comentaban los asistentes al acto.
“Dos escasas semanas nos faltan, estamos en el último jalón para que los mexicanos decidan si votarán por más de lo mismo o si optan por el cambio histórico” dijo Andrés Manuel.
¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente! Coreaban todos.
Sólo un despistado o de lo más pendejo podría votar por los candidatos del PRI-AN.
Entonces la “guerra sucia” de 2006 pretende aplicar su segunda edición pero la población ya no les cree. Inútilmente. 
En segunda y tercera páginas de la primera Sección –La República– el POR ESTO! de hoy lunes, nos da cuenta sucintamente de los desastrosos indicadores económicos en que está dejando FeCal al país. El penúltimo peldaño de desarrollo entre los gobiernos latinoamericanos, con menos del 2.0 % de crecimiento. En estas condiciones, ¿qué clase de mexicano votaría por EPN o por JVM quienes declaran todos los días que continuarán con el mismo régimen económico actual, el neoliberalismo en decadencia?
Ha sido una larga cadena de estrategias fallidas en las que han agotado el PRI y el PAN sus últimos períodos de gobierno. La crisis se agudizó desde el tiempo de De la Madrid, agravada dolorosamente por Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, cuya fallida forma de gobernar fue continuada en una medida exponencial por los gobiernos panistas. Por eso se ha acuñado el lugar común de que “son más de lo mismo”. Por eso EPN y JVM se encuentran aterrorizados por su inminente derrota. Partidos en estertores de muerte. Se hallan enfermos, en depresión absoluta ni siquiera bipolar que tiene momentos de lucidez. Sus respectivos partidos nos han conducido a pagar un elevado costo económico, social y de seguridad. Más de 55 mil crímenes en menos de seis años es un apocalipsis de sangre, miseria y luto para todos los mexicanos. De verdadera tragedia comparable sólo al fascismo franquista, pinochetista y cercana por lo indignante al autoritarismo y represión de los gobiernos priístas (Atenco, Acteal, Aguas Blancas, Tlatelolco, 10 de junio, Guardería ABC, mineros de Pasta de Conchos, etc.).
En el renglón educativo, por los pobres resultados de la enseñanza-aprendizaje en su renglón básico, nuestro país ocupa un lugar 107 a diferencia del 79 que tenía hace pocos años, también muy mal pero hoy estamos peor.
Con la educación secundaria, preparatoria y superior, México se posiciona en un lamentable lugar número 107 por su calidad educativa. Esto pone de relieve la urgente necesidad de hacer una cirugía mayor en el sistema educativo nacional que pase por acotar la negociación de la ley con los maestros, la idoneidad de los profesores y el diseño de programas de estudio que permitan crear una ciudadanía competitiva.
Las llamadas pruebas evaluativas como la Enlace y otras, son sólo instrumentos que miden pero no comprenden las distintas realidades escolares y ni siquiera los niveles educativos reales que tienen los maestros y los alumnos. Esto es así, porque al estandarizar preguntas y respuestas cerradas no puede conocerse la riqueza de los aprendizajes y conocimientos que están alcanzando las distintas escuelas en su diversidad y en sus contextos, en la capacidad de razonamiento y deducción que ofrece y hace posible esta diversidad y por el contrario se reproduce lo peor de los viejos esquemas de repetición y memorización de control autoritario y vertical y de imposición de un curriculum irrelevante. En este contexto, los sectores marginados como los niños rurales y de barrios están en desventaja. Con ello se enriquece (¿?) además a los líderes venales del magisterio.
En cuanto a las políticas públicas del mercado laboral, tenemos un nada honroso lugar 114. Es gravísimo lo que hemos caído en el presente año.
Es casi seguro que en lo que se refiere a las inversiones en México, los principales obstáculos son el crimen y el robo; la corrupción pública y privada; gobiernos priístas y panistas ineficientes; nulo acceso al financiamiento; inequidad en la aplicación de impuestos; restricciones de la política pública laboral; infraestructura inadecuada; tasas injustas de impuestos; fuerza de trabajo mal preparada; inestabilidad política: reducidos valores éticos en la fuerza de trabajo; inflación; inestabilidad gubernamental; regulaciones inadecuadas al manejo de divisas; y pobre sistema de salud pública. Casi nada. ¿Cómo podríamos calificar a este gobierno panista-priísta que desdibuja su calidad de oficio político?
El indicador más bajo se localiza en la confianza pública en los políticos con el 2.2 como medida, seguido por el favoritismo de los gobernantes para la toma de decisiones con el 2.9 (del 1 al 10) que incluye por supuesto el tráfico de influencias, amiguismo y nepotismo. ¡Ah!, pero eso sí, el rubro mejor calificado es el proteccionismo a las inversiones extranjeras que no pagan tributos ni reinvierten en el país.
En cuanto a la salud pública, nuestro país –este pobre México– no logra disminuir, sino que se están elevando, los índices de frecuencia de mortalidad materna, cáncer cérvico-uterino, diabetes, muertes violentas, y por padecimientos relacionados con el estrés.
A estas alturas del partido, no puede existir un solo mexicano que asegure que con los recientes gobiernos priístas-panistas el país ha mejorado. Por el contrario, afirman que la guerra de Calderón, alcahueteada por los priístas, ha tenido altísimos costos económicos-sociales como acabamos de ver.
Por todo lo anterior, es de esperarse que los mexicanos con su voto electoral apoyados por los jóvenes, sean determinantes en el cambio de rumbo de este maltrecho país que nos están heredando el PRI y su aliado el PAN.