jueves, abril 12, 2012

El Estado policiaco en marcha : María Teresa Jardí


María Teresa Jardí
El Estado policiaco en marcha

Se deja presa a la rehén política elegida como show distractivo mientras se va creando un ejército paramilitar y paralelo al nacional y al otro paralelo que en México se conoce como Estado Mayor, un ejército a modo de la represión como regla de vida que se ha ido imponiendo en nuestro país para el pueblo pobre que somos la inmensa mayoría.
Y se llega así al punto de que encender una motocicleta puede llevar a cualquiera a verse acusado en nuestra nación de terrorismo. Mientras a los verdaderos terroristas: el ejército paramilitar creado y encabezado por García Luna, se le regalan las leyes necesarias para que de plano el narcoestado mexicano se convierta también en un estado policiaco. Un representante a modo seguirá al frente del desgobierno federal. Nadie tendría que dudar que va a seguir la condena de bajada a los sótanos del infierno que sobre México se ciñe por orden del imperio yanqui, cumplida por desgobernantes de los partidos que sufre el pueblo de México. Que nadie lo dude. AMLO se ha garantizado el no voto de los votantes de izquierda.
Deja la Corte de la ignominia que es la actual Corte mexicana —surgida de un golpe de estado dado para convertirla en eso por Zedillo, otro empleado del gobierno yanqui— presa a la rehén útil para crear el ejército paramilitar productor de futuro de asesinos seriales, al que se le permite, a manera de distracción para el pueblo previamente idiotizado, que realice shows televisivos avalados por una mujer capaz de prostituir hasta el dolor que la muerte de un hijo significa a la que el fecalismo panista le paga con una candidatura a modo del país para el que se regalan represivas leyes a modo del Estado policiaco que el usurpador busca también reglar, al que también el espurio le ha permitido crear, para encabezar, su particular ejército de paramilitares.

Se deja presa, por la Corte a modo de la derecha que en México encabeza un usurpador genocida, y ya se impone como regla la criminalización incluso por la búsqueda de una hija que el mismo estado propicia que se desaparezcan y ya se convierte en terrorismo el encendido de una motocicleta.
Y ni qué decir del Poder Legislativo, si cabe, de los tres desarmados por completo en su estructura ética, el que peor acaba y el que pinta para continuar, sin ya ni siquiera incluir a las tres voces que, desde el PT, algo dicen todavía.
Las leyes retroceden al punto de que ya nadie se encuentra a salvo de la cárcel incluso sin necesidad de montajes que harán que el estado mexicano sea juzgado por las Cortes internacionales, que nadie lo dude, en un futuro no tan lejano, al menos para la historia.
Se deja presa a la rehén política de García Luna, la Wallace y Televisa y al que estorba se le asesina. Y los pocos que por este horror protestaban van muriendo de manera extraña o porque la edad a nadie perdona de la aventura definitiva.
Y en el IFAI se impone a un abogado a modo incapaz de cuestionar ni lo que salta a la vista. Y, no, porque tenga o no maestrías. Porque no tiene lo hay que tener Gerardo Laveaga y por eso lo elige el usurpador para que esconda la información que no conviene que se conozca. Un personaje a modo capaz de esconder lo que no convenga que se sepa por “razones de estado” que en el caso mexicano lo son de un estado al que se le ha desarmado del todo su estructura ética.



1 comentario:

Dorita dijo...

yo no queiro que regrese el PRI a someternos y a robar como nunca.. la candidatura de isabel miranda wallace se me hace algo innovador.. me gustaria que ganara porque ella no es igual que todos los politicos