La salud de Josefina, ¿qué hay detrás? : www.sinembargo.mx

La salud de Josefina, ¿qué hay detrás? 
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Sin comentarios La “baja presión” de Josefina Vázquez Mota no representa un problema de salud… Bueno, sí… pero no… eso no le impide que realice sus labores como candidata panista a la Presidencia de la República, o al menos eso es lo que dicen sus cercanos. La aclaración que ofreció el martes pasado la vocera de la campaña de Josefina, Augusta Díaz de Rivera Hernández, no hizo sino alimentar todavía más los rumores sobre la supuesta debilidad en la salud de quien fuera titular de la Sedesol y de la SEP, pues las contradicciones de su equipo de campaña y lo dicho por la propia JVM no hicieron sino aumentar las preocupaciones por su condición física. En rueda de prensa, la aún diputada federal y aspirante al Senado por su natal Puebla agregó: “la candidata lo dijo ayer [lunes 2 de abril], fue un problema de presión, ella sufre de baja presión, es una condición que ya tiene desde hace mucho tiempo y que no le impide sus labores como candidata, pues goza de un muy buen estado de salud”. Es decir, sí… pero no. El “descontrol”, como Díaz de Rivera Hernández llamó al mareo y al temblor de piernas y manos que Vázquez Mota sufrió el lunes durante una presentación en la Ciudad de México y que la obligaron a tomar asiento cuando dirigía un mensaje a los participantes del foro “Agenda México 12.18”, no requiere de un examen médico pues su estado de salud es “muy bueno, reiteró la vocera poblana. Pero esta declaración contradice la explicación que la propia JVM le dio a los reporteros, al salir del evento realizado en el Hotel Marriot de la Ciudad de México: “Estoy agripada como es evidente y evidentemente yo creo que, fuimos a la Huasteca, estaba haciendo muchísimo calor, bajamos, venimos corriendo. Me siento perfecta, me siento fuerte”. Para abonar las dudas, Roberto Gil Zuarth, coordinador de la campaña, aseguró a un reportero de Proceso que el mareo de la candidata fue porque tomó antigripales, pero esa misma fuente expuso que entre otros colaboradores trascendió que fue una baja en el azúcar. Antes del episodio del 1 de abril de 2012, el 4 de abril de 2009 también estuvo a punto de desvanecerse en un acto público. De acuerdo con una crónica del diario Reforma, Josefina Vázquez Mota oía de pie junto al presidente Felipe Calderón Hinojosa las palabras de agradecimiento que le dirigía el mandatario por el trabajo realizado durante los 27 meses que estuvo al frente de la SEP, cuando se sintió mal. “Ya los nervios, según dijo, la habían traicionado, cuando momentos antes ella misma hizo un recuento de los logros de su gestión al frente de la dependencia, incluso tuvo que interrumpir su discurso y disculparse aduciendo que estaba muy nerviosa y emocionada. “Sin embargo, cuando comenzó a escuchar las palabras del presidente Calderón, las piernas comenzaron a temblarle de manera involuntaria. “El movimiento era tan evidente que le acercaron una silla, mientras el Presidente continuaba con su discurso, y ella lo escuchó sentada”, se expuso en el texto publicado por ese diario capitalino. El lunes pasado, Josefina se vio débil, cansada y más delgada que de costumbre. Se entiende por su apretada agenda, pero evidenciar esa carencia de fortaleza física cuatro días después de arrancar la campaña no parece un buen augurio cuando faltan más de 80 días para el cierre de este proceso. Más allá de la rumorología, el equipo de campaña debiera entregar un informe completo sobre la salud de quien es la primera mujer en México que realmente tiene posibilidades de llegar a la Presidencia de la República. Estamos hablando de un reto enorme para ella, más allá de su partido, de los intereses del presidente Calderón y de los obstáculos que le pongan sus adversarios –de dentro y fuera del PAN, claro–. Su salud física, por tanto, es un asunto público que debiera aclararse debidamente, antes de que la ola de especulaciones –como la que se ha esparcido en las últimas horas y que menciona que el PAN estaría pensando en un reemplazo de candidato–, sigan creciendo y terminen por disminuirla totalmente.
  * * * Y bueno, por otro lado, los malestares físicos de Josefina Vázquez Mota también lograron apaciguar un tanto el tono belicoso de la campaña. La de ayer fue una jornada tranquila en cuestión de acusaciones entre los tres principales contendientes a la Presidencia de México. Aunque también hubo una buena carga de ironía relacionada con los “temblores” de la panista. El primero en pedir no hacer “escarnio” por el mareo de la ex diputada fue Andrés Manuel López Obrador. “Somos seres humanos” y a cualquiera le puede pasar en condiciones de estrés y fatiga, dijo en su conferencia matutina el candidato de las izquierda. Caballeroso, el tabasqueño le deseo lo mejor a Josefina, aunque no desaprovechó para darle un coscorrón, al referirse que sus adversarios, a diferencia de él, no están acostumbrados a trabajar; él, destacó, siempre ha iniciado sus labores muy temprano y encima hace deporte. Por su parte, el priísta Enrique Peña Nieto también lamentó los malestares físicos que presentó la candidata del PAN a la Presidencia de la República. Antes de presentarse en un encuentro con el Comité Directivo del PRI en Sonora, el candidato presidencial envió un mensaje a su adversaria política respecto a su salud: “Esperemos que no sea nada serio. Le deseo una pronta recuperación”, dijo el mexiquense haciéndose eco de los saludos de AMLO para Josefina.   * * * Otra piedrita que se le acumula al perredista Leonel Godoy Rangel y a su administración en Michoacán, y ahora es incluso por un contrato por “chelas”. Resulta que ayer, el director de la Expo Feria Michoacán 2012, José Manuel Romero, anunció una pérdida económica para la organización del evento este año debido a que la administración pasada hizo un cobro anticipado por 14 millones de pesos con la cervecería Modelo. Con esto, la Comisión de Ferias, Exposiciones y Eventos del Estado de Michoacán, quien organiza la feria desde 2002, no percibirá este año los ingresos por el permiso otorgado a la Cervecería Modelo, ya que aseguran la administración anterior de la dependencia cobró los recursos. Romero aseguró que desconoce el destino de los 14 millones de pesos, pero  la Contraloría estatal realizó una investigación para ver si hubo anomalías y descubrió que, efectivamente, la empresa cervecera firmó el convenio hasta 2013. Sin embargo, del dinero nadie sabe, nadie supo; la compañía pagó, pero la lana por las “chelas” se esfumó como en acto de magia.

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