Ahora busca acabar con
lo poco salvable que le queda al Poder impartidor de la Justicia
María Teresa Jardí
Si Zedillo fue el autor del golpe de Estado a la Suprema Corte de Justicia que
nos dejó la actual con ministros de índole tan fascista. Calderón va por todo
en los días que le quedan y ahora busca acabar con lo poco que le queda de
verdadera distribución de la Justicia al Poder impartidor de la misma.
La venganza, otro crimen instalado por Zedillo en contra del pueblo mexicano,
con el logro de que hoy ya se encuentra convertida en una regla en manos de la
clase política.
El usurpador no iba a dejar de vengarse por la exhibición de lo que se escondía
detrás del michoacanazo. Calderón odia por igual al PRI y al PRD. Fanático que
es no tolera la divergencia. Calificado como sociópata por los expertos en el
tema de las conductas humanas, carente del sentimiento de culpa, una vez
enfilado como genocida con su falsa guerra contra el narcotráfico. Guerra de
exterminio de algunos cientos de miles, sin ninguna duda, de los muchos
millones de pobres condenados a la miseria en aras del lucro desmedido de todo
lo relativo a la cosa pública, convertida por unos cuantos, en cosa propia,
para el deleite de las mafias PRIANISTAS que impunemente en México de todo se
han apoderado. Usurpador, que se sabe, Felipe Calderón de la silla del
Ejecutivo federal y miembro destacado del partido expendedor de las mafias
político empresariales que controlan el poder...
Se le hizo igual de fácil apoderase del Estado de Michoacán como su feudo
propio. Tan fácil que le resultó desatar la guerra siniestra que en México se
impulsa, entre otros, igual de impresentables, por el intocable dueño del
ejército paramilitar de hombres de negro.
Se le hizo fácil deshacerse de Godoy en Michoacán porque considerando en su
locura, tolerada por el resto de la clase política sin denunciarla ni ponerle
un alto, que el estado de Michoacán completo le pertenecía a la familia
Calderón por “derecho” propio.
Y sin medir las consecuencias ni mucho menos integrar bien las averiguaciones
dio el golpe que se le revirtió como la crónica le habría anunciado si fuera capaz
de entender lo que las crónicas anuncian como resultado de los actos que no se
rigen por las leyes. Para eso se crearon los seres humanos los sistemas
normativos como forma de control de la vida civilizada. Pero, claro, Calderón
ya no entiende nada, de nada. Suponiendo que alguna vez haya entendido algo.
Porque, vamos a ver, sí, es cierto que es increíble que Fox haya sido
presidente de este país. Pero la pregunta debe pasar por cuestionar qué pasa
con la izquierda mexicana que llevó a los mexicanos a votar por la derecha
pensando que por ahí el cambio podía haberse dado, aunque fuera de manera
imperfecta y tan sólo para construir una democracia formal del todo y sin
ningún otro apelativo.
Los ciudadanos hoy hemos decidido que queremos que llegue el Peje. Pero los que
mandan no lo quieren y el ciudadano no tiene importancia real alguna. De ahí
que el IFE no quiera a los estudiantes como observadores en la elección.
Observadores molestos del fraude que es claro que se prepara. Para legalizarlo
se nombraron al Luna Ramos, hermano de una de las más conservadoras
representantes de la Corte creada a modo por Zedillo, como presidente del
TRIFE.
A ver quién es el valiente juez que con la ley en la mano deja libre al hijo de
un narco al que la PGR no le prueba nada incluso porque desde Los Pinos está
arreglado todo con el padre narcotraficante sacado por el PAN de la cárcel. En
lugar de agradecer, Peña Nieto se estaría deslindando de Fox si fuera algo más
que el producto chatarra que la telebasura quiere imponer como Presidente del
país para hacerse del control político del todo.
A ver qué juez se atreve a dejar en libertad a los generales acusados para
manchar al Ejército Nacional viendo que se suspende e investiga a los jueces
que dejaron libres a los muchos presidentes municipales acusados sin pruebas y
para obtener, los Calderón, el control total del Estado de Michoacán.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario