Por María Teresa Jardí
Más allá de que ya se han dictado algunas sentencias, dos o tres, por jueces que de plano no han querido hacerse cómplices de tan evidente fabricación de culpables a modo usando la corrupción, la CNDH ya lleva emitidas 32 Recomendaciones con relación a la fabricación de culpables del fecalismo usurpador, en aras de que les tomaron, onerosamente en todos los sentidos, no sólo en el económico que de suyo es muy grave y demostración de los muchos candados sociales que no se tienen en México y demostración, también, de la inutilidad de un Poder Legislativo que hace décadas que no representa más que a sus propios intereses. Sino por lo que toca a la pérdida de vidas y de la libertad de personas completamente inocentes. Como lo deben ser la inmensa mayoría de asesinados cuyas ejecuciones son “justificadas”, por los asesinos gubernamentales, diciendo que son delincuentes. Sin presentar jamás ni la menor de las pruebas al respecto.
Les tomaron el pelo a militares y “policías” que ya se van mostrando como grupos paramilitares.
Les tomaron el pelo, sí, y no es que se enteren ahora que ya es público porque la prensa lo publica.
Hace meses que en la Comisión de Ciencia y Tecnología del Congreso, o algo así, no recuerdo cuál era ni si así se llama alguna. Pero estoy segura de que vi la sesión pasada por el canal del Congreso. La más interesante de las que yo he visto, por cierto, donde lo denunciaba y demostraba, incluso de manera gráfica, un científico.
Sin que por eso se dieran por enteradas las instancias respectivas. Corrupción es el gastar del erario millonadas pagando por la nada. Por la nada, sí. El científico demostraba que algunos de los aparatos comprados y usados por la SEDENA que por esos días declaraba sobre lo muy útiles que le resultaban los mismos, no tenían nada dentro. No obstante lo cual, con acercar los mismos a las personas se convierten en delincuentes.
“... El gobierno federal y distintas administraciones estatales han invertido más de 345 millones de pesos en la adquisición de mil 161 aparatos denominados Detector Molecular GT 200, una especie de varita mágica que indica dónde hay y quién tiene drogas, armas y explosivos. Científicamente la efectividad de este aparato no está demostrada y la empresa inglesa que lo fabrica, Global Tecnical LTD, está siendo investigada por un fraude en Gran Bretaña...”, dice la nota publicada ayer en el diario La Razón de hoy.
Les tomaron el pelo a diversas instancias del desgobierno federal encabezado por el usurpador de derecha panista Felipe Calderón, vendiendo a diversas instancias, entre las que destacan los militares y los “policías”, detectores de droga falsos. Pero con ellos las insignes fuerzas del orden público han practicado, según lo consignado ya de manera pública montones de cateos en lugares donde la droga no existía y no se sabe cuál es el número de personas enviadas a un penal acusadas falsamente por los que gastan el dinero del erario, impunemente también, pagando a los que les toman el pelo.
Una chulada todo lo que con la seguridad se ha ido tirando al caño de las aguas negras por el panismo a modo de la telebasura también y del entreguismo que el yanqui Obama necesita y quien hoy se inventa ridículos complots, para ver si alcanza la nominación para continuar al frente del imperio para volver a traicionar a los que sigan creyendo que por tener negra la piel, quizá, tenga más blanca el alma. Lo mismo que hace Calderón aquí acusando al PRI de nexos con el narcotráfico, sin enterarse que el caso más evidente es el de su correligionario Fox y que por ahí tiene que empezar a dar marcha atrás al fenómeno que a él sí de manera diáfana lo implica. Contra AMLO el miedo. Contra el PRI el rumor supliendo la prueba. Demostrando FeCal que el panismo convertido en gobierno se torna en contaminante y peligrosa basura genocida.
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