miércoles, septiembre 07, 2011

El espurio presidente dijo ¡NO! : Gilberto Balam Pereira


La reforma a la ley de seguridad de la UNAM
Gilberto Balam Pereira
El espurio presidente dijo ¡NO!


La tarde de ayer, en el Castillo de Chapultepec, el Rector de la UNAM, José Narro Robles, presentó al presidente espurio FeCal y a sus funcionarios de Seguridad, un documento propositivo del que se infiere los niveles de corrupción e impunidad que prevalecen en México, documento enfocado al mejoramiento de las políticas públicas en materia de seguridad, ante el clima de violencia que impera en el país. En resumen contiene una serie de elementos que fundamenten una Política de Estado para la Seguridad y la Justicia en Democracia.
En la formulación del documento participaron 88 especialistas en Seguridad, de México e invitados de Argentina, Chile, Colombia, Estados Unidos, Canadá, España, Italia, Uruguay y Venezuela.
En primer término se presenta el diagnóstico de la inseguridad, quiénes son los actores del cambio y 36 actividades a emprender. Además de identificar los problemas, se aborda las medidas preventivas, con prioridad al respeto a los Derechos Humanos; se aborda también el futuro de los jóvenes y de otros sectores como las mujeres.
Entre las acciones se menciona:
—Una política financiera sostenible y de largo estímulo.
—Tener el control de las adicciones.
—Contar con una política local en materia de seguridad.
—Una política que defienda y proteja a la juventud.
—Una reforma policial.
—Racionalizar el sistema penal.
—Combatir a fondo el lavado de dinero.
—Reformar los sistemas de inteligencia.
—Mejorar radicalmente la política de seguridad en las fronteras.
—Que se celebre un acto político y social.
—Que se genere consensos para cambiar las estrategias de seguridad y centrarlas en el combate a la impunidad, la preservación de la integridad personal y la defensa de los derechos humanos.
Contar con un diagnóstico de la inseguridad en permanente evaluación mediante indicadores que permitan evaluar resultados.


—Disponer de vías para la información continua de logros a la población.
—Ampliar la capacidad para el tratamiento de las adicciones.
—Contar con programas de enfoque multidimensional para los jóvenes de modo que propicien su permanencia y reinserción en los sistemas educativo y laboral.
—Dotar de autonomía a la Auditoría Superior de la Federación, a las agencias de los ministerios públicos y a los institutos de acceso a la información.
—Creación de una Defensoría de la Juventud y establecer un Registro Nacional de Víctimas.
—La UNAM dispone del diseño de un plan que posibilite el regreso de las fuerzas armadas a sus funciones naturales y un plan de políticas de reclutamiento, formación y promoción en todas las instituciones de policías y procuración de justicia, así como actualizar el diagnóstico integral del sistema carcelario, dimensionar a la prisión como el último recurso, despenalizar conductas no graves, modificar las condiciones para la prisión preventiva y el uso de las medidas cautelares, entre otras acciones.
La respuesta inmediata del pelón enano de gafas, fue un rotundo ¡NI MADRE! ante el tamaño de tan sólida, objetiva y real cadena propositiva de Seguridad que le presentó el Rector. Tal como contestó el usurpador Fecal a Sicilia: “este diálogo no nos conduce a ninguna parte. La violencia de hoy es debida a que no se actuó con eficiencia y prontitud en el pasado. Los conmino a hacer propuestas prácticas y factibles, porque en su documento, Sr. Rector, sólo he encontrado un hueso sin carnitas. La estrategia actual que he asumido continuará y se intensificará”. ¡Qué tal!
La tele nos muestra a un individuo encanecido, con ambas manos siempre en la cara y en la cabeza por la migraña a causa de sus compuestos de cognac con coca cola, nervioso, fruncido de la frente, se notaba a leguas que todavía estaba atravesando la cruda de la orgía etílica que organizó en Los Pinos con motivo de su reciente “informe”. Embriaguez alcohólica y de respuestas chafas, andanada de cifras y estadísticas amañadas, mentirosas e incongruentes con que respondieron al Rector FeCal y sus igualmente espurios secretarios.
Y todavía agrega el pelón enano de gafas: “no acaban ustedes de entender que para el Estado en estos momentos, no es opcional la estrategia para combatir o no al crimen. Es mi convicción que hay que garantizar el respeto a la ley como principal responsabilidad y la razón de esta autoridad”.
Miren nomás —digo, oyendo hablar al burro, oírlo hablar de orejas. ¿Quién está violando la ley con sacar al Ejército de su cuartel para emprender una estúpida guerra civil con las consecuencias que todos conocemos?
Los jilgueros secretarios espurios no podían terminar el evento sin salir con otra andanada de babosadas. Como por ejemplo.
Del Consejo de Seguridad, Alejandro Poiré, altanero, expresó que “sí, cómo no, el DIF tiene atención de pacientes de drogadicción”. Claro, estaba presente la tal Margarita Zavala, consorte del espurio. Alpistes para el enorme problema.
Y el pinche Lujambio, con sus ínfulas heredadas de la SEP y de la Gordillo, tuvo la desfachatez de dirigirse a una autoridad como el Rector Narro, como si fueran iguales (ni comparación):
“Perdone don José, pero le puedo asegurar que tenemos 850 mil maestros del país que están ‘listos y capacitados’ (¿?) para hablar a los niños sobre las drogas”.
Oiga don Lujambio, —pregunto— ¿y cuándo y dónde se les capacitó a estos educadores para el fin que señala? ¿Quiénes los capacitaron, quiénes los supervisan para comprobar que están cumpliendo con su tarea asignada? Aceptando la mentira de sus famosos maestros que tienen la tarea tan especial, y considerando que los alumnos de secundaria son todavía niños, tiene usted aún un déficit de atención de más de 10 millones de niños sin atender en el país sobre el asunto. No nos venga con cuentos, con lo bien que usted nos cae.
Y aquél ridículo “epidemiólogo” del virus de la influenza, de la Secretaría de Salud, Angel Córdova Villalobos, entrando al quite, respondió que “el consumo de drogas en México ha bajado”, que gracias a SUS políticas públicas. ¡Qué tal!, de ese tamaño las cosas con estos sinvergüenzas.
Bueno, señores espurios, si tan bien les va con su “guerrita” al narco ¿por qué en vez de que disminuyan las víctimas del narcotráfico, han rebasado la exorbitante cifra de los 50 mil?

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