miércoles, marzo 07, 2012

Más de lo mismo : Virginia González Melgarejo


Más de lo mismo

Por: Virginia González Melgarejo



El sábado pasado el PRI celebró su 83 aniversario y, tal vez debido a su avanzada edad olvidó lo que han significado para México sus gobiernos; de la misma manera, sin el menor pudor acusa a los gobiernos panistas del desastre de país que vivimos hoy en día, sin recordar que los gobiernos del PAN han sido mera continuidad de lo que los priistas diseñaron como forma de gobernar; olvidan también que todas las formas de fraude electoral fueron de su invención y los panistas sólo se han apropiado de ellas, lo que fue ampliamente demostrado en su nada pulcra elección interna y, además, han mostrado capacidad para encontrar otras formas más actuales, acordes a nuestros tiempos como el fraude cibernético, mediante el cual Felipe del Sagrado Corazón de Jesús arribó por la puerta trasera a la presidencia de la República, con el invaluable apoyo de los priistas.

Los gobiernos del PRI olvidan que ellos mismos crearon a los líderes sindicales charros y “vitalicios”, como Elba Esther Gordillo quien pactó con Calderón su arribó a la presidencia a cambio de los privilegios que todos conocemos, o Carlos Romero Deschamps, quien se adueñó del sindicato de petroleros y además de haber sido acusado por el desvió millonario de recursos del sindicato a la campaña presidencial de  Francisco Labastida, es propietario de empresas contratistas de Pemex y ha sido nuevamente premiado con una candidatura al Senado por la vía plurinominal, eso si que es un descaro. Ambos “líderes” han sido cobijados por los gobiernos blanquiazules, a los cuales no les ha incomodado pactar y tomarse la foto con semejantes personajes.
Los priistas al decir que no quieren más pobreza, dolor, sangre y corrupción y pedir el retiro de gobernantes incompetentes, no se limpiaron la boca ensangrentada por tremenda mordida, olvidan que la pobreza arribó y creció en el país gracias a sus política económica que ha sido fielmente copiada por los azules; olvidan la matanza del 68, la de Acteal y la de Aguas Blancas, los desaparecidos y asesinados durante sus gobiernos, y qué decir de la corrupción. Critican la corrupción del gobierno panista, que protege a los verdaderos responsables de la muerte de los 49 bebés en la guardería ABC de Hermosillo o las andanzas de Martita Sahagún y el enriquecimiento inexplicable de sus hijos; o la megabiblioteca Vasconcelos y, recientemente, la Estela de Luz y los festejos del bicentenario, que no fueron diferentes a la Colina del Perro, la fortuna de los Salinas y los gobernadores tricolores como Mario Marín, Ulises Ruiz, Humberto Moreira. La pobreza, el dolor, la sangre y la corrupción no son diferentes en los gobiernos del PRI y del PAN, que en la practica se han mimetizado y no son sino más de lo mismo. Las acusaciones de unos a otros, encierran un profundo cinismo y muy poca vergüenza pues ambos han sido una pesadilla y han seguido los mismos caminos, y los mismos caminos invariablemente nos llevaran al mismo destino.
Afortunadamente hay otros caminos que nos llevaran a otro futuro. Transitar por ellos está en nuestras manos y no muy lejos. El cambio verdadero, no lo dude, está por venir.
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